Este título ofrece una semblanza de G. K. Chesterton y una guía sintética de sus obras. En él se habla de todos sus libros, se comentan extensamente los más importantes, y se intenta dar una idea completa de su categoría humana e intelectual, de su modo de pensar y argumentar tan convincentes, y de su personalidad y estilo tan singulares y atractivos.

“Se han escrito muchos libros excelentes sobre Chesterton, unos titulados simplemente con su nombre -pues el personaje y su obra resultan difíciles de acotar-, y otros con alguna frase que acentúa rasgos de su figura intelectual o histórica -«sabiduría e inocencia» o «un hombre para todas las épocas», por ejemplo-. Yo elegí Chesterton: un enamorado de la verdad después de barajar varias posibilidades y de comprobar que ese aspecto tan relevante de su modo de ser y estar en la vida -descrito por él mismo cuando hablaba del amor insaciable por la verdad que guiaba las pesquisas detectivescas del Padre Brown-, no estaba expresamente mencionado en títulos de biografías anteriores.

(…) Esto ha llevado a que me hiciesen a veces preguntas que no tienen respuestas del todo satisfactorias. Así, hay quienes desean saber qué libro es el mejor para comenzar a leer a Chesterton. Otros, que han intentado leerlo y han tropezado con dificultades, piden textos suyos que les resulten más llevaderos. Como es lógico, hay quienes no comparten mis opiniones acerca de si uno de sus libros es mejor o peor que otros. Al final, la experiencia me dice que, tal como me pasó a mí, a Chesterton uno lo descubre un día, debido al atractivo de alguno de sus textos o de sus libros, y a partir de ahí comienza una personal búsqueda del tesoro que, asombrosamente, enseguida tiene recompensa.

Así que he visto la preparación de este libro como una nueva oportunidad de ganar más y mejores lectores para Chesterton. He buscado que sea una guía sintética pero completa de toda su producción, por eso hablaré brevemente de todas sus obras; una guía que oriente hacia las más importantes, que son las que comentaré algo más extensamente; y una guía que, evitando cualquier visión reduccionista, dé una idea de la categoría, el pensamiento, las argumentaciones, el estilo y la singularidad de Chesterton.

Con todo, sé que, por muy bien que lo haga, siempre será insuficiente pues el personaje y su obra son inabarcables. Esa riqueza y profundidad es la que explica que, como más de una vez se ha dicho, a Borges hay que comprenderlo literalmente cuando afirma que «la obra de Chesterton es vastísima y no encierra una sola página que no ofrezca una felicidad», y cuando dice que «quizá ningún escritor me haya deparado tantas horas felices como Chesterton». Ni una sola página y ningún otro escritor: por mi parte puedo afirmar lo mismo.” (De la Introducción, pág 7-8)