Descripción

«En este sentido, ¿San Luis María Grignion de Montfort ha hecho verdaderamente escuela? Esto no puede dudarlo quien lea atentamente su libro Tratado de la Verdadera Devoción a la Santísima Virgen. Sin duda alguna, él no concibió esta obra y menos aún su carta intitulada Secreto de María, como un completo y metódico tratado de espiritualidad; pero ni bien sus distintas enseñanzas no están desarrolladas en ellos de idéntico modo, ni se encuentran ahí todas sus aplicaciones prácticas, nos equivocaríamos al pensar que estos dos opúsculos no contienen sino implícitamente, o como en germen la doctrina que queremos exponer. Numerosas son las cuestiones largamente tratadas en estos libros; y cuántas otras, incluso accesorias, se encuentran indicadas al menos sumariamente. De manera que nuestro trabajo no se inspira solamente en los principios propuestos por el Santo, sino que comenta sus obras; expone tanto la letra como el espíritu de estas. Hecha esta aclaración, mostraremos brevemente que la espiritualidad del santo de Montfort se distingue por una forma particular de la cual él es verdaderamente el autor.

(…) La unión con Dios, tal es el fin al que nos conduce la doctrina espiritual de Montfort. Es verdad que es un fin común a todas las escuelas de espiritualidad, pero aquí nos abocamos a un género más restringido o más próximo, al considerar nuestra unión con Dios bajo este aspecto: Cristo viviendo en nosotros. “Así llegamos al fin último y particularísimo de esta devoción, que nos propone hacer vivir a Jesucristo en nosotros en virtud de esa dependencia total y absoluta llamada la Santa Esclavitud.

El medio elegido para alcanzar este fin no es otro que María. Ella aparece también en muchas otras devociones y métodos de vida interior, pero, sin importar la dignidad del culto que se le rinda y del auxilio que se le pida, la Virgen no forma parte más que accesoriamente y se queda como en el exterior. En la espiritualidad del Santo de Montfort, por el contrario, María es parte esencial; ya que es ella quien le otorga su forma específica y sus características distintivas. El objeto formal de esta Devoción, en efecto, es la mediación y la soberanía de María; y su acto propio, es la consagración mediante la Santa Esclavitud. Por eso también se la llama la Santa Esclavitud de María; y he aquí su verdadero nombre, el que expresa su naturaleza.» (Prefacio, pág 5-6)

 

INDICE

• PREFACIO
• PRIMERA PARTE. El Fin o Jesucristo viviente en nosotros
  • CAPÍTULO I. Jesucristo.

Artículo 1. Gracia de unión. – Artículo 2. Gracia habitual. – Artículo 3. Gracia capital

• • CAPÍTULO II. Cristo viviente en nosotros.

Artículo 1. Por Él. – Artículo 2. Con Él. – Artículo 3. En Él. – Artículo 4. Nuestro crecimiento en Cristo.

• • CAPÍTULO III La vida y el camino de unión.

Artículo 1. La idea fundamental de esta enseñanza. – Artículo 2. Un vistazo histórico sobre los maestros de esta escuela. – Artículo 3. Notas características de esta enseñanza.

• • CAPÍTULO IV. La santa esclavitud.

Artículo 1. ¿Qué debe entenderse por esclavitud? – Artículo 2. Fundamento de la santa Esclavitud. – Artículo 3. Cualidades de esta esclavitud. – Artículo 4. Valor del término esclavitud.

• SEGUNDA PARTE. El Medio o la Unión a Jesús por María
  • CAPÍTULO 1. María es nuestra Madre.

§ I – María nos ha engendrado con Cristo. § II – María engendra a Cristo en nosotros. § III -Diversas fases de la maternidad espiritual de la Santísima Virgen.

• • CAPÍTULO II. María tesorera y distribuidora de la gracias.

Artículo 1. Tesorera. – Artículo 2. Distribuidora de las gracias y cooperadora del Espíritu Santo. – Artículo 3. En qué consiste la cooperación de la Santísima Virgen o a través de qué actos se ejerce su mediación.

• • CAPÍTULO III. La realeza de María.

Artículo 1. Los títulos de esta realeza. – Artículo 2. Alcance de esta realeza. -Artículo 3. Reina de los corazones.

• TERCERA PARTE. Las prácticas de la perfecta devoción a la Santísima Virgen
  • CAPÍTULO I. El espíritu de María.

Artículo 1. He aquí la sierva del Señor. – Artículo 2. Las enemistades. – Artículo 3. Efectos del espíritu de María.

• • CAPÍTULO II. La consagración.

Artículo 1. Alcance de esta consagración y consecuencias prácticas. – Artículo 2. La perfecta consagración comparada con otros actos. – Artículo 3. Espíritu de esta consagración. – Artículo 4. Riqueza de nuestra pobreza.

• • CAPITULO III. La práctica interior.

Artículo 1. Obrar por María. – Articulo 2. Con María. – Artículo 3. En María. Artículo 4. Para María.

• • CAPÍTULO IV. La infancia espiritual.

• CUARTA PARTE. La ascética de esta devoción
  • CAPÍTULO I. Ejercicios preparatorios a la consagración. – Su división en cuatro períodos. – Razón y valor práctico de esta división.

Artículo 1. Los doce días preliminares. -Artículo 2. Primera Semana: conocimiento de uno mismo. –  Artículo 3. Segunda Semana: conocimiento de la Santísima Virgen. – Articulo 4. Tercera Semana: conocimiento de Jesucristo.

• • CAPITULO II. Observaciones prácticas para obrar en unión con María.

Artículo 1. ¿A qué acciones se aplica la práctica interior? – Artículo 2. De la renuncia necesaria para obrar en unión con María. – Artículo 3. ¿Cómo realizar nuestro acto de unión? – Artículo 4. Preguntas y respuestas.

• • CAPITULO III. La perfecta devoción y las tres etapas de la vida espiritual.

Artículo 1. Vía purgativa. – Artículo 2. Vía iluminativa. – Artículo 3. Vía unitiva.

• • CAPÍTULO IV. Camino fácil, corto, perfecto y seguro.

Artículo 1. Camino fácil. – Artículo 2. Camino corto. -Artículo 3. Camino perfecto. – Articulo 4. Camino seguro.

• QUINTA PARTE. Vida de unión a María
  • CAPÍTULO I. La Oración.
  • CAPÍTULO II. Examen de conciencia y trabajo.
  • CAPÍTULO III. De la Santa Comunión.
  • CAPÍTULO IV. María y el santo sacrificio de la Misa.